Por Víctor Suárez
Todo eso se ve muy bien desde el palacio querido amigo.
Pero, ¿como lo vería usted desde el ensanche capotillo? desde la cañita, desde los güandules, o desde la misma Villa Mella, por donde elegantemente transita el metro? Desde estos barrios sin agua, ni energía eléctrica, sin empleo, y sin horizonte, distinguido amigo, usted lo vería diferente, todo es según el color del cristal con que se mira.
A nosotros los que no tenemos ni para comprar un pan para comer con chocolate de agua por las noches antes de ir a la cama y así acostarnos boca abajo para mitigar el hambre, a nosotros no nos importa ni el metro, ni los elevados, ni los túneles, nosotros queremos, trabajo, educación, salud y alimentación y los gobiernos que ha tenido este país incluyendo el suyo que también es el mío, porque soy de la Fuerza Nacional Progresista, partido que los aupó a ustedes a estar en la papa hoy, no han sido capaces de resolverle esos básicos problemas a los pobres.
Usted está tan fuera de la realidad, de la situación de este pueblo que crees que aquí, después que Leonel Fernández es presidente se acabaron los pobres con todo y su miseria, que lo que se come aquí es metro, y que la medicina que bebemos, son elevados y túneles.
La vida de la gente es lo que debería importar, pero, a usted ni a su presidente, les importa cuando una madre no tiene con que comprarle leche a sus niños, cuando en la mensa no hay un pan para cuando los muchachos lleguen de la escuela, cuando no tenemos medicinas para el abuelo.
Ustedes juntos a sus gobiernos de hambre y de miseria son fomentadores de las calamidades, de toda esta perturbación, que se refleja en aumento cada día en las calles de mi pueblo, causada por la falta de oportunidades que esta clase de gobierno endebles les ofrece a la gente humilde, ustedes y sus gobiernos oscurantistas, solo saben hablar de sus obras materiales que con el dinero del pueblo exhiben, pero jamás podrán hablar de la bien hechura de seres humanos con calidad de vida, con una existencia orgullosa, no tienen argumentos para hablar de un pueblo saludable, educado alegre y feliz.
Por eso lo que tenemos es una población, desnutrida, enferma, sin educación, y desesperado por tener una mejor vida, ustedes seguirán sin argumento para hablarle a este pueblo, cosas que el pueblo quiere escuchar.
Si no existieran los pobres desposeídos en este país de DIOS, su discurso seria hermoso, pero como la mayoría no transita por los lugares que usted a mencionado, como la generalidad de los dominicanos aun somos rurales y nos está llevando quien nos trajo, su articulo no trasciende, su articulo esta fuera de época.
Háblenos de las cosas que nos hacen vivir libres de esta muerte lenta, por esta carencia que parece infinita, ayúdennos a vivir como seres humanos.
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